Beirut, 29 jul (Prensa Latina) El uso estratégico que hace la Resistencia de Líbano (Hizbulah) de sus sistemas de defensa aérea ocultos pretende contrarrestar el dominio israelí, comentó hoy la publicación especializada The Cradle.
A medida que aumentan los enfrentamientos con Hizbulah (tras la reciente acusación israelí de responsabilizar a la Resistencia de atacar a civiles en el Golán sirios ocupado el sábado), parece que las fuerzas de Tel Aviv intentan provocar al movimiento libanés y activar sus defensas aéreas.
En un análisis, el sitio web dirigido por periodistas que cubren Asia Occidental, precisó que los miembros del Eje de Resistencia en la región desarrollaron rápidamente proyectiles militares que pueden llegar a todas las partes de la entidad israelí, destruir e incluso paralizar sus defensas aéreas.
De acuerdo con el texto, en Tel Aviv, todas las miradas están centradas en Hizbulah, que mantiene en secreto sus capacidades de defensa aérea para poder conservar el elemento sorpresa en un escenario de guerra total.
En esencia, la estrategia de defensa aérea de la Resistencia libanesa consiste en mantener un delicado equilibrio: proteger sus activos, minimizar las pérdidas y estar preparado para intensificar sus medidas defensivas en consecuencia, apuntó.
Según la investigación, desde los años 1990, Hizbulah utiliza misiles portátiles SAM-7 o Strela-2, de diseño soviético, para protegerse de la invasión aérea israelí en Líbano.
En este contexto, el periódico israelí Haaretz señaló que, si bien es poco probable que estas armas antiaéreas alcancen objetivos como el avión no tripulado Hermes 900 (que opera a altitudes medias o altas), en noviembre pasado, un SAM-358 iraní atacó con éxito al modelo Hermes 450.
Hizbulah emplea en el presente misiles portátiles para atacar a los aviones israelíes, con el objetivo de expulsarlos del espacio aéreo libanés, refirió The Cradle.
A propósito, indicó que la Resistencia intenta ocultar sus tácticas y sistemas avanzados de defensa aérea y prefiere mantener ocultas sus estrategias integrales, incluidos los despliegues geográficos y los planes de emboscada en tiempos de guerra.
Por otra parte, mencionó que cualquier plan para contrarrestar eficazmente las operaciones aéreas israelíes debe incluir la interrupción de su red más amplia de apoyo operativo, como bases aéreas, centros de comando, radares y puntos de comunicación, algo que Hizbulah está haciendo desde el 8 de octubre.
Dadas las avanzadas capacidades de la fuerza aérea israelí, respaldadas por continuos avances tecnológicos, inversiones occidentales y una amplia experiencia operativa, Hizbulah enfrenta desafíos importantes, comentó.
No obstante, enfatizó que su estrategia en el presente está impulsada más por necesidades e imperativos operativos que por la falta de capacidad o coraje para enfrentar directamente a los aviones de guerra de Tel Aviv.